10/11/21

Gratis no existe, alguien siempre paga la cuenta y el duende no existe la que limpia y ordena la casa es mamá y la vaca no da leche - Dr.Jorge de Paula

 Mi amigo Cacho Machin nos decía hace muchos años:

1. ¿Tú estás diciendo que entraste gratis a ese cumpleaños? ...
Estas equivocado. Porque Gratis no existe, Alguien pagó por ti. Habrán sido los padres de la cumpleañera u otra persona, pero ... ¿!!! que entraste GRATIS? !! mmmhhh No. No. Gratis-Gratis… NO EXISTE.
2. Cacho tenía 3 hijos varones y cuando eran chicos recargaban a su madre porque no ordenaban sus cosas.
Un día los reunió a los 3 y les dijo:
¿Uds vieron que se fueron a estudiar y dejaron todo desarreglado y todo sucio ?.
Y vieron que cuando volvieron estaba todo ordenado y limpio.
¿Uds creen que es un duende qué pasa una varita mágica y convierte el desorden en orden y limpia toda la ropa? ..
NOOOO, no es un duende… ES MAMÁ. Ahhh no sabían que era mamá. Si es mamá, así que ahora lo saben.
Así que de ahora en adelante vamos a ayudar a mamá, porque el duende no existe.
Así como lo son estos Hay muchos otros secretos que son muy importantes que sean enseñados a nuestros hijos en las edades más tempranas.
1. Gratis no existe.
2. Quien limpia u ordena la casa no es un duende, es mamá.
3. La vaca no nos da la leche, se la quitamos.
Otra enseñanza clave es que aprendan muy temprano la diferencia entre PLACER y FELICIDAD.
Cuando Martin Seligman afirma: “el camino a la felicidad no nos permite tomar atajos” nos está dando un consejo muy sabio.
Mucha gente (especialmente a la edad adolescente o joven) tiende a tomar atajos para conseguir el placer: las drogas, el sexo sin amor, la televisión, las compras. Y no soy tan moralista como para sugerir que la gente no haga estas cosas, pero si alguien basa su vida exclusivamente en atajos y descuida los otros aspectos de su vida, como el desarrollo personal o el sentido que da a la vida, acabará sacrificando su felicidad a largo plazo.
El problema es que cuando más rica sea una sociedad, más atajos existen.
Pese a ello los niños, adolescentes y jóvenes están continuamente bombardeados por publicidad engañosa que les quiere mostrar que la felicidad se obtiene con tal bien material, o bebida, o camiseta, o auto o lo que sea.
Se les confunde placer con felicidad y eso sucede todo el tiempo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

COMENTARIOS: