31/10/19

Ser activos y no sedentarios potencia los beneficios en la salud - Dra. Cecilia del Campo

Como liberar tus antidepresivos naturales

El segundo cerebro: el sistema entérico y la microbiota intestinal

Nuestro intestino aloja en su interior millones de neuronas y trillones de microorganismos protectores  (la Microbiota intestinal) .... y es por eso que los científicos ahora lo reconocen  como “el segundo cerebro”.

Científicos de la universidad de Cornell han descrito por vez primera nuevos procesos celulares y moleculares relacionados con la comunicación entre los microbios de los intestinos y las células del cerebro.

A lo largo de las últimas dos décadas, los investigadores han observado una claro vínculo entre los trastornos autoinmunes y una serie de alteraciones psiquiátricas. Por ejemplo, las personas con trastornos como la enfermedad intestinal inflamatoria, la psoriasis y la esclerosis múltiple podrían también sufrir una carencia de microbiota intestinal y experimentar ansiedad, depresión y trastornos en el estado de ánimo. 
Los riesgos genéticos para los trastornos autoinmunes y las alteraciones psiquiátricas parecen estar asimismo muy relacionados. 
Pero, cómo la salud de los intestinos afecta al cerebro era algo desconocido.

“Un nuevo estudio proporciona información sobre los mecanismos que permiten que los intestinos y el cerebro se comuniquen a nivel molecular”, indica David Artis, uno de los participantes en el trabajo.

Para el estudio, publicado en la revista Nature, los investigadores utilizaron modelos de ratón para saber más sobre los cambios que suceden en las células cerebrales cuando la microbiota del intestino se ve mermada. Los ratones que fueron tratados con antibióticos para reducir sus poblaciones microbianas, o que fueron criados para estar libres de gérmenes, mostraron una capacidad notablemente reducida de darse cuenta de que un peligro amenazador ya no estaba presente.

Para entender la base molecular de este resultado, los científicos secuenciaron el ARN en células inmunes llamadas microglías que residen en el cerebro, y descubrieron que una expresión genética alterada en esas células tiene influencia en remodelar cómo las células cerebrales se conectan durante los procesos de aprendizaje. Estos cambios no se encontraron en las microglías de ratones sanos.

El investigador Conor Liston señala que los cambios en la expresión genética en las microglías (conexiones entre las neuronas) podría alterar el recorte de las sinapsis, las conexiones entre las células cerebrales, interfiriendo con la formación normal de las nuevas conexiones que suceden a lo largo del aprendizaje.

Los científicos intentaron revertir los problemas de aprendizaje en los ratones mediante la restauración de su microbiota intestinal en el transcurso de varias edades desde el nacimiento. 
Al parecer, se podían rescatar los déficits de aprendizaje en los ratones libres de gérmenes, pero solo si se intervenía justo después del nacimiento, lo que sugiere que las señales de la microbiota intestinal son necesarias muy temprano en la vida.

Cronobiologia alimentaria

CRONOBIOLOGÍA ALIMENTARIA: 

A algunos les cuesta arrancar el día, otros sienten una fuerte compulsión alimenticia durante la tarde-noche... Simplemente sufren el déficit de un neurotransmisor y una adecuada pauta alimentaria o un determinado aminoácido a ciertas horas, les puede ayudar porque los efectos fisiológicos, tanto de los alimentos como de los fármacos varían con las horas en que se ingieren. 

Y es que, como todos los seres vivos, el ser humano está sometido a un funcionamiento rítmico mediante los llamados ritmos circadianos, es decir, variaciones diarias de alrededor de 24 horas, controlados por relojes internos que regulan el sueño y la vigilia, la temperatura corporal, la secreción de hormonas y, por supuesto, la nutrición. 

Muchas de estas conductas se explican por la cronobiología alimentaria:

1. Los ciclos circadianos: todos los seres vivos tienden a estar sincronizados con el entorno exterior, ya que confiere una ventaja competitiva que nos permite anticiparnos a los cambios del entorno. Nuestro reloj interno se divide en dos: el matutino (5 am a 5 pm), el cual busca darle energía al cuerpo, y el nocturno (5 pm a 5 am), en el que nuestro cuerpo busca restaurarse y relajarse. En esos dos turnos se secretan diferentes sustancias químicas y hormonas que logran que el cuerpo logre su objetivo. 

Nuestro reloj interno se divide en dos: el matutino, el cual busca darle energía al cuerpo, y el nocturno, en el organismo busca restaurarse y relajarse.

2. El hambre y la saciedad: los ritmos diarios parecen estar implicados en las señales de hambre y saciedad, los horarios de comidas y, finalmente, en el grado de obesidad.

3. Cinco ingestas diarias: son óptimas porque así el cuerpo se adapta mejor a los ritmos de secreción de la insulina. Se ha observado que alterar la ritmicidad natural de acción de la insulina se interrumpe el entorno rítmico interno de los tejidos insulino-sensibles, y predispone a los animales a la resistencia a la insulina y la obesidad.

4. Alimentarnos al ritmo de los ciclos: la diferencia entre la ganancia y la pérdida de peso en las personas está determinada por el momento del día en que se consume una comida, más allá de su valor energético. Si consumimos un alimento que estimula o da energía en el turno nocturno, lo más probable es que almacene grasa, de igual modo si comemos algo relajante en la mañana, es más fácil que perdamos músculo. 

5. Los neurotransmisores: son moléculas químicas que posibilitan la transmisión de mensajes entre dos neuronas y que el cerebro se comunique con el resto del organismo para hacer posibles las funciones fisiológicas. 

6. Carbohidratos: desayunar con pan o cereales está justificado, ya que se producirá un óptimo aprovechamiento de los carbohidratos para la obtención de energía. De la misma manera, en el almuerzo se deberían incluir alimentos energéticos, sobre todo en forma de carbohidratos complejos como arroz, pasta, legumbres, pan y patatas, así como las versiones integrales de estos alimentos. 

7. La tirosina: es un aminoácido y es precursor de la dopamina y la noradrenalina, por lo que sería recomendable tomar por la mañana las proteínas ricas en tirosina como el huevo, queso o el jamón y los glúcidos de absorción lenta como el pan integral. No debemos olvidar tampoco el consumo de vegetales, tanto a mediodía como de noche. 

8. El triptófano: es el aminoácido precursor de la serotonina y la melatonina, que se sintetizan por la tarde y noche respectivamente, por lo que lo recomendable será tomar aquellos alimentos ricos en él por la tarde, como los frutos secos y la fruta. La cena, por su parte, sería el momento para el pescado, el marisco, el pollo o pavo y la verdura de hoja. 

9. Consecuencias orgánicas: no respetar aquello que nos pide el cuerpo como comer, dormir o descansar acaba pasando factura y sus consecuencias orgánicas se hacen notar: insomnio, falta de atención y concentración, cansancio, depresión, además de acentuar enfermedades crónicas tales como la diabetes, la hipertensión y obesidad.

9/10/19

Los 7 secretos para conseguir el éxito y la felicidad en la vida - Dr.Mario Alonso Puig


Los 7 secretos para conseguir el èxito y la felicidad en la vida no son frases, ni consejos, sino un entrenamiento de la fortaleza mental a través de la puesta en práctica de diferentes estrategias. 
Se trata pues, de una sección, en la que a lo largo de diferentes programas, nos han ido dando clave a clave.
1) Gestiona tu expresiòn de la cara y gestionarás tus emociones.
http://www.youtube.com/watch?v=ru0Fld2Zr3w
2) Usa tu diálogo interior para apoyarte y no para anularte.
3) Combatir el estrés;
http://www.youtube.com/watch?v=ZZKOSVcH_QI
4) Intlúyete a tí mismo;
5) Si lo puedes imaginar, lo puedes crear;
http://www.youtube.com/watch?v=Y1DB2rEXaRA
6) Por la noche, eliges lo que te construye o eliges lo que te destruye; 
7) No hay felicidad sin el otro; 

4/10/19

La salud psicoemocional es también un estado de equilibrio



Ana piensa en su vida e imagina una balanza, de un lado los factores estresores y del otro los factores protectores, y el fiel de la balanza que son las creencias y paradigmas. 
Para mantener el equilibrio recurrimos a lo bueno, y visualizar lo bueno permite potenciarlo. 
La salud sería el resultado de una serie de interacciones entre la genética, la educación, la nutrición, los entornos socio-culturales, la escala de valores de vida y el sentido que estamos dando a ella, determinantes de una estructuración psico-emocional- vincular que fluye naturalmente hacia una lectura compasiva de las adversidades, una sensación gratificante de la vida y una visión esperanzadora del futuro. 
Ello se reflejará en un levantarse sin sentir cansancio, en tener buen apetito, en dormirse y despertarse con facilidad, sentirse de buen humor, pensando y actuando con generosidad y acierto y en no sentir odio, rencor ni resentimiento por persona, clase social, país o etnia alguna. 
Si en realidad te sientes así, entonces tienes buena salud. http://drgeorgeyr.blogspot.com/2011/01/la-represion-no-es-un-buen-modo-de.html

2/10/19

La Conciencia Situacional, el profesionalismo y la responsabilidad - Curso de Capacitación 2019 del MSP


La Conciencia situacional se puede entender simplemente, como el estado en el cuál sabemos y entendemos bien qué es lo que está pasando alrededor nuestro.
Los factores que pueden alterar la conciencia situacional incluyen el estrés, la fatiga, la experiencia, la carga de trabajo y las distracciones.
La conciencia situacional, el profesionalismo y la responsabilidad es lo que determina que existan y se sigan normas y protocolos, y se tengan siempre presente los riesgos y las complejidades de las tareas.
Permite además planificar y adelantarse a las situaciones.
COMO DESARROLLAR UNA MEJOR CONCIENCIA SITUACIONAL:
1. Conocer bien el trabajo que realizan nuestros compañeros.
2. Descubrir la mentalidad y las motivaciones de las personas que trabajan con nosotros.
3. Usar lista para ordenar las tareas que debemos realizar, y mantenerlas actualizadas.
4. Desarrollar una comunicación sólida con nuestros jefes y con mandos medios.
5. Desarrollar habilidades tecnicas y no tecnicas.
6 Asegurarnos que los líderes del grupo participan en las discusiones sobre temas importantes.
7. Compartir experiencia y conocimientos con los compañeros.
Signos que nos están indicandos que estamos perdiendo nuestra conciecia situacional:
1. Confusion o asombro y posiblemente ansiedad en torno a una situación.
2. Existen conflictos personales que no podemos resolver.
3. NO PODER acatar los procedimientos standares de trabajo.
4. Información de dos o más fuentes que no coinciden.
5. Comunicación parcial y no efectiva con enunciados vagos o incompletos.
6. Fijarse en una cosa al grado de excluir todo lo demás.
7. No poder resolver discrepancias.
8. No ver a nuestro alrededor.



Cuestiones que debilitan nuestra conciencia situacional:
Estrés mental sea por carga de trabajo. La muerte de un allegado. Un divorcion. Un ambiente hostil o irrespetuoso. Factores económicos.
Estrés físico: el hambre, el clima, el ruido, la fatiga y la falta de resistencia física.
Rebeldía (no nos gusta que nos digan lo que tenemos que hacer).
Invulnerabilidad: pensar que ciertas cosas no me sucederán a mí.
Ser impulsivos: cuando nos enfrentamos a una decisión sentir la necesidad de hacer algo, lo que sea de manera inmediata.
Saturación: cuando no tenemos un plan o no estamos preparados, pequeñas sorpresas pueden abrumarnos rápidamente.



En caso de emergencia pensar esto:
Mantener la calma. Pensar por un momento. Evaluar las alternativas y elegir una.
No postergar las cosas hasta que sea demasiado tarde.
Permitir que otras personas conozcan la situación
No dudar en declarar una emergencia.
Concentrarse en la situación y no en la emoción
Si cometemos un error, que se puede rectificar, olvidarnos del error y concentrarse en lo que viene.
Siempre tener un plan y un plan de respaldo.


Por multiples razones, podemos perder nuestra conciencia situacional en el trabajo o en nuestra vida cotidiana.
En este video son identificadas situaciones que conllevan a la pérdida de la conciencia situacional, cómo identificar ese estado emocional y cómo recuperar nuestra conciencia situacional.