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23/4/19

El mejor estado del ser humano no es "estar enamorado" ... es "estar en paz" - Mónica Esgueva

El mejor estado del ser humano no es estar enamorado, es estar en paz
Atrás quedó la búsqueda de la pareja perfecta o el amor ideal, es momento de encontrar el amor propio y la paz interior, pues, en realidad, el mejor estado del ser humano es ése, estar en paz.

El problema es que la búsqueda de un amor idealizado, sin siquiera cuestionarnos  o conocer nuestras necesidades y deseos, puede llevarnos  a caer en relaciones equivocadas. 
Aquellas de las cuales se salen con heridas y quizá también culpándonos o reclamando al destino por no encontrar la persona ideal para compartir nuestra vida y todo lo que con ella venga.
O peor aún, nos quedamos en ellas bajo la sombra de la insatisfacción sólo para ver si en algún momento la magia aparece y cambia las cosas…
Aunque sabemos bien cómo terminará la historia.
La respuesta no está en aplicaciones de citas o rituales mágicos, sino en encontrar la paz interior, ese punto de tranquilidad en el que todo en tu vida (interior y exterior), está en equilibrio. 
Ese lugar donde te reencuentras con lo realmente importante, sabiendo que todo es parte de un aprendizaje para poder fluir y vibrar con el mundo.

Una frase del Dalai Lama reza: “Necesitamos aprender a querer lo que tenemos y no tener lo que queremos, a fin de obtener una felicidad estable y duradera”. Eso significa que más allá de vivir buscando lo que no tienes o siempre has deseado, debes aprender a apreciar lo que hay en tu vida.

Sanando tu interior. Según Mónica Esgueva, especialista en Mindfulness y autora de varios libros, si no estás en paz contigo, nunca podrás estarlo con los demás ni con el mundo, lo que te llevará a librar batallas imaginarias, cuando la vida no debería ser una guerra.

La clave es aprender a vivir el presente, pues enfocarte en el futuro o aquello inalcanzable, hará que el hoy se te escape. La autora aconseja adoptar la filosofía oriental que reconoce que la vida está hecha de yin y yang, es decir, aunque tengamos el dulce sabor de las victorias, también es importante pasar por las derrotas, pues el dolor es parte necesaria e inherente del ser humano.

¿Eso significa renunciar al amor? 
No, tampoco al romanticismo, simplemente significa enfocarte en tu interior y ser feliz con tu presente. Entender que el amor llegará en el momento que deba hacerlo, sin forzarlo, sin buscarlo. El amor se encuentra, no se busca; es decir, aparece en tu vida cuando descubres lo que mereces y no lo que soñaste.

En el momento en que en tu vida haya equilibrio y plenitud, el amor será complemento, no respuesta a vacíos o ausencias. Aunque también puede que descubras que no es el amor de pareja tu fin ideal y disfrutes de la paz de tu equilibrio.

26/5/12

La rigidez mental como generadora de violencia y estrés - Dr. Walter Riso


Walter Riso: "La mejor mente es la que sabe que no es perfecta: "Entre un 20 y un 30%de la gente que te rodea tiene una mente rígida
La mente es un universo fascinante que, en ocasiones, se escapa a la propia lógica. Sin embargo, en este mundo existen mentes abiertas a la duda y mentes deshidratadas por la indigestión de creer que prevalecen sobre las demás. El futuro de las últimas parece que no será muy bueno. Con esta idea, la de mostrar los diferentes tipos de mentalidades que reinan en el universo humano, Walter Riso nos presenta 'El arte de ser flexible' (Planeta/Zenit), un libro que nos abre a la experiencia del análisis y la reflexión de uno mismo. ¿Y tú, tienes una mente rígida o una mente flexible?
Leyendo el libro, una de las tesis que podemos sacar es que los extremos siempre son malos. En temas de la mente no podemos ser radicales, ¿no es cierto? Sí, es cierto. Por un lado tenemos la mente rígida, que es aquélla que tiene un tipo de conocimiento y se aferra a él y no es capaz de cambiarlo y que no soporta la contradicción. El otro extremo sería la mente líquida, que sería aquélla que es indolente, que no tiene sustancia ni consistencia, una mente posmoderna que no toma compromisos. Por eso siempre se evitan los extremos en todos los sentidos, de hecho, el camino del medio parece ser la salida más inteligente, o por lo menos la que han aceptado todas las tradiciones espirituales y científicas: Confucio, Aristóteles… Digamos que esa percepción que haces es cierta, pero yo me voy más contra las mentes rígidas que contra las líquidas.
Usted dice que “el amor es una obra de arte en la que hay que trabajar todos los días”, ¿pasa lo mismo con la mente?
Claro, porque ser flexible no es un estado, no es que tú digas "buenas tardes, soy un ser flexible y de aquí en adelante seré flexible". Es un reinventarse, crecer, actualizarse, revisarse… Es una tarea dinámica de autoconocimiento donde ves que vas hacia un extremo o el otro y te vas acomodando. Los antiguos la llamaban la "virtud correctiva", porque si la lógica y la vivencia te demuestran que estás equivocado, lo ideal es cambiar. Esa no resistencia al cambio se tiene que llevar siempre a un estado móvil de autoperfeccionamiento.
¿Existe una mente perfecta, o una mente perfecta es aquélla que es consciente de sus limitaciones?
La palabra perfecta no me gusta, prefiero la "buena mente", una mente adaptativa. La mejor mente posible es aquélla que se da cuenta de que no es buena, de que no es perfecta. Precisamente, esa capacidad de dudar de sí misma, de ser capaz de modificarse sin sufrir traumas la hace buena. Es como la teoría del bambú, que se inclina con el viento pero no se quiebra. Lo principal de todo esto es no tomarse muy en serio a uno mismo. Hay gente que se empacha con la trascendencia y que se indigestan con la idea de que ellos son muy importantes. Yo creo que uno debe tomarse el pelo a uno mismo, y la mente flexible es la que sufre el humor permanentemente.
"La negación de ver las cosas como son", algo muy típico de los políticos…Los políticos son los que se ven, pero también pueden ser profesores universitarios o la señora que vende empanadas en la esquina. Puede ser cualquiera. Una mujer que te diga: "No dudo de que mis empanadas son las mejores", y acto seguido añade, "me niego a revisar la receta". Esta mujer es "fundamentalista" con la empanada. Si después te dice, "no quiero actualizarme y ver cómo se hace una empanada nueva", entonces tenemos una vendedora de empanada "retardataria, dogmática, fundamentalista y prudentista". Si uno se pone a pensar se da cuenta de que entre un 20 y un 30 por ciento de la gente que le rodea tiene una mente rígida. El problema de la rigidez en las personas es que genera violencia y estrés a su alrededor. Por ejemplo, un jefe rígido es una persona que no te escucha y está solidificada en su creencia.
Siempre podemos encontrar excepciones, ¿no?
Si vamos a buscar la excepción de la regla, no digo que no haya que tener principios, sino que, además de tenerlos, hay que estar dispuesto a revisarlos si la cuestión, la evidencia va para otro lado.
¿Por qué le cuesta tanto al ser humano rectificar?
Aunque yo no creo mucho en los pecados capitales, habría que irse a la soberbia, la arrogancia. El egocentrismo, la arrogancia y el no soportar la crítica. La gente tiene una autoestima que no suele ser muy fuerte. Creo que hay tres virtudes que cuando aparecen te hacen ser más fuertes: la capacidad de centrarte, la capacidad de ser humilde y la capacidad de auto crítica. Reconocer que uno se equivoca, la propia insuficiencia o los propios errores o, como decía Sócrates, “el maravilloso no sé”, te libera porque el mañana te la carga el pensar que si no gano empato. Esto sí que te quita mucha energía.
Lo que está claro es que nadie está en todo momento en posesión de la verdad absoluta…
Hay cosas que son relativamente estables. Si yo suelto una botella de agua y se cae al suelo eso es una verdad en este contexto, es algo real. Cuando ya vamos a verdades distintas, opiniones, a puntos de vista, a la visión del mundo que maneja cada uno, su ideología, su religión, etc., digamos que ahí sí podemos pensar que puede llegar una persona y mostrarnos una realidad distinta. Por eso, ser abierto, escuchar al otro, tener otro punto de vista es importante, pero quizás no para cambiar. Ser una persona flexible no implica que deba cambiar. Por ejemplo, si una persona no estuviera a favor del aborto y otra sí, la persona flexible no es que tenga que cambiar su opinión por la del otro y decir “yo ya creo en el aborto”. La flexibilidad está en poner mis ideas entre paréntesis durante un tiempo, abrir el frigorífico y meter mis ideas un rato y escuchar al otro, entender que es un interlocutor válido, ver sus argumentos y profundizar en ellos. Puede que al final te quedes en la misma posición, pero esa posición ha surgido de entender tu punto de vista, pudiéndolo reforzar o no. La gente con una mente flexible vive mucho mejor, más tranquila, porque no quiere imponer a la realidad un sistema binario de todo o nada.
¿El humor es algo fundamental verdad?
No puede haber flexibilidad sin humor. No puede haber sabiduría sin humor. No puede haber crecimiento personal sin humor. No puede haber felicidad sin humor… No sé qué molesta más, una persona rígida o una persona que se cree importante a sí misma. Una persona que carece de sentido del humor, que se lo toma todo muy en serio, que es solemne, que le tiene fobia a la alegría… Como dice Montaigne, “no importa lo que pienses ni cuán alto sea tu trono, siempre estarás sentado en tu culo”। El humor te permite distanciarte, ver otro punto de vista, jugar con los contrarios, mejora el sistema inmunológico… La ausencia de humor es una enfermedad que necesita tratamiento, lo que pasa es que no sabemos cómo hacerlo।
¿Todo esto es una cuestión de educación?
Yo diría que es aprendida, y se aprende por la familia. Familias autoritarias, estrictas en la educación que no le permiten al niño pensar no dan pie a la creatividad. Estas familias tienen hijos con mente rígida, no cabe duda. Sociedades y subculturas estrictas que generan miedo y no permiten el punto de vista personal, familias muy dictatoriales… generan niños rígidos que, obviamente, no es cualquier cosa. Una persona rígida sufre, se deprime, se estresa, molesta a los demás… Si tú acorralas a una persona dogmática se convierte en autoritaria, y de ahí a un dictador hay un pasito. Yo no hablo de personas políticamente conservadoras, sino de personas rígidas, porque puede ser tan rígido un conservador, como una persona de izquierdas. Es más, las investigaciones demuestran que muchas personas conservadoras desde este punto de vista pueden ser flexibles sin problema.
El “perfeccionamiento constante de la mente”, algo necesario para cualquier persona, ¿no?
Eso es determinante. Hay tres herramientas básicas para funcionar y para que la mente esté constantemente creciendo. Una es el pensamiento crítico, es decir, no quedarte con lo que te dan, dudar pero no como inseguridad, sino como una duda que progresa. El humor y la lúdica sería el segundo. El tercero es el inconformismo. No creo que las personas que se conforman vivan mejor. Hay que ser inconformista desde el punto de vista de un curioso, de explorar el mundo para matar la resistencia al cambio y mantener la mente ágil, viva y fresca
Tomado del blog de Carmenchu (Carmen Viejo Diaz) - Guadalajara - España
http://creciendoenlaentrega.blogspot.com
Walter Riso : el arte de la FLEXIBILIDAD
http://www.walter-riso.com/

4/7/09

Nuestro cerebro "humano" tiende a buscar la belleza

LAS 3 ETAPAS EVOLUTIVAS DE NUESTRO CEREBRO - Dr. Josep Antequera

Como se puede observar en la diapositiva todos "homosapiens-sapiens", disponemos de 3 cerebros superpuestos, que funcionan en conjunto a través de haces nerviosos interconectados por millones de redes. La diapo representa el modelo propuesto por McLean, en el cual
las regiones centrales se consideran cerebro “reptil” (cerebro reptiliano), las capas que las rodean, cerebro paleomamífero o selvatico o cerebro límbico y las regiones más externas, cerebro neocerebro o cerebro urbano o Neocórtex. Cada uno de dichos cerebros tiene funciones distintas, utiliza distintas sustancias químicas y a pesar de ello, actúan juntos, al unísono.
Henri Laborit, ha desarrollado más este concepto y extrae del desarrollo de cada uno de estas partes sobre las demás reflejos conductuales, que es interesante tener en cuenta desde el punto de vista del análisis de los comportamientos de los individuos en su relación con el entorno. Es entonces patrimonio de nuestro neocerebro la búsqueda de expresiones artísticas como lo define el neurofisiólogo Francisco Mora en su libro ¿Enferman las mariposas del alma?.
http://www.psicoterapiaintegra.com.ar/paradigmaenie.php
COMO NUESTRO CEREBRO "HUMANO" BUSCA LA BELLEZA: Neuroarte, neuroestética y belleza -
El Dr. Francisco Mora (catedrático de Fisiología) ha publicado un libro denominado: ¿Enferman las mariposas del alma? donde reflexiona sobre la relación entre el cerebro y la percepción de la belleza.
Mora analiza cómo el cerebro humano (Neocerebro ó neocórtex), puede llegar a elaborar ese complejo sentimiento al contemplar una obra de arte, una pintura, una música, una obra literaria, una escultura, o cualquier otra manifestación que pueda embellecer la vida de todo ser que haya evolucionado más allá de sus cerebros más primitivos, que son el reptiliano-marino y el cerebro límbico-selvático, como se describe en la diapositiva cedida gentilmente por el Dr.Fabio Celnikier.
Es entonces patrimonio de nuestro cerebro superior o neocerebro o cerebro humano, el que nos diferencia de los restantes seres vivientes que habitan nuestro planeta, el que nos permite la elaboración de estas emociones, de estos sentimientos, de estas respuestas, que como dice Juan Zorrilla de San Martín en su "Sermón de la Paz": El hombre es el único ser viviente que tiene "necesidad" y capacidad agregaríamos, de estas creaciones y elaboraciones y por ahí podríamos entender al verdadero significado del arte, que bien puede ser, entre otros, el de atenuar nuestros apetitos groseros, con la revelación de otros deleites, capaces de hacernos más amable la vida
El arte es realización de esa belleza, como sabemos, por medio de signos sensibles: color, forma, sonidos, palabras; pintura, escultura, música...
Y si bien son notorias, , las discrepancias de los hombres al respecto; unos creen bello lo que los otros feo; así como existe de todas formas una "conciencia universal sobre lo bueno y lo malo", también existe una conciencia estética, que es, a la sensibilidad, lo que la ley natural al entendimiento. La belleza es la verdad; y la verdad en las cosas es el carácter. Obtener el carácter de un hombre feo es hacer cosa bella: Velázquez y sus enanos o sus bufones.
La virtud moral no consiste tanto en realizar sonantes actos heroicos, cuanto en cumplir los deberes habituales, que pueden dar ocasión a pequeños heroísmos.
El cultivo de la virtud estética no es tanto la realización o el goce de valiosas obras de arte, cuanto el esfuerzo por saber hallar lo bello en todo cuanto nos acompaña.
El hombre no puede vivir sin grandeza, y ella tiene que estar a nuestro lado, como los demás elementos de la existencia. Todo puede ser grande; todo lo es.
La música sinfónica, la escultura, la pintura son incidentes de nuestra vida, y propiedad sólo de algunos; pero todos somos dueños de la belleza difusa, de la armonía o el orden que sale de las cosas que nos rodean, entre las cuales está, en primer término, como el canto de los pájaros, la casa que habitamos.
Ver texto completo del Sermón de la paz en:
http://drgeorgeyr.blogspot.com/2009/02/el-sermon-de-la-paz-juan-zorrilla-de.html
Todas las culturas han sentido, estudiado, descrito o comentado estas sensaciones y disciplinas o inspirado hondos sentimientos que han querido verse arrancados de las profundidades del espíritu humano.
Pero hasta ahora pocos análisis se han hecho desde la perspectiva biológica del cerebro, último y recóndito lugar donde se elabora todo lo que se ve o se admira, se toca o se siente.

NEUROARTE - NEUROESTÉTICA Y BELLEZA:
El Neuroarte o la Neuroestética es eso, la comprensión en términos neurológicos de lo que llamamos arte o belleza.
El cerebro ha desarrollado la capacidad de, a partir de objetos y casos particulares, extraer un objeto ¿ideal? capaz de ser universal y poder a su vez ser aplicable a todos los casos particulares creando con ello un concepto, una idea que habla de todas ellas como de una sola.
El cerebro puede deducir universales de los concretos. Y así cuando la realidad nos martillea con miles de pájaros de formas y tamaños, plumas, colores, cantos y conductas diferentes, es capaz de crear el concepto de pájaro que resume a todos los pájaros del mundo.
Este pájaro “universal” es un abstracto creado por nuestro cerebro. Y con esa abstracción el cerebro alcanza el principio básico del pensamiento humano y la comunicación.
Y es además con esta abstracción que el hombre ha volado a lugares inimaginables del conocimiento y con él a las concepciones del arte y la belleza pues con este proceso ha llegado a idealizar de forma suprema al pájaro y haciéndolo un pájaro hermoso, majestuoso y bello como no existe ni podría existir en la realidad, haciendo de él la “esencia pura e inmutable del ave” como tal vez lo expresaría Platón.
¿Qué permitió al cerebro desarrollar esa capacidad de encontrar propiedades o relaciones comunes a muchas cosas y extraer un concepto, una idea, que hable de todas ellas como una sola?
La Neurociencia comienza ahora a trenzar los hilos con los que se construye ese proceso de abstracción y conocer las neuronas y circuitos que lo realizan llegando a la conclusión clara de que se trata de una propiedad inherente a la función del propio cerebro con el que ha ahorrado tiempo en los procesos de aprendizaje y memoria y aumentado con ello sus capacidades de supervivencia.
Nuestro cerebro, en áreas muy concretas que llamamos áreas visuales, posee neuronas que responden a la visión específica de puntos de contraste de luz sombra o colores. Y por la convergencia de esas neuronas que captan puntos se integra la percepción de líneas.
Líneas infinitamente pequeñas que moduladas por otras neuronas construyen las formas.
Y otras neuronas lo hacen con el color y el movimiento de los objetos o su profundidad o su orientación.
En otras áreas del cerebro hay neuronas y circuitos que terminan sintetizando, creando, la percepción consciente del objeto único y concreto.
Pero lo más interesante es que hay neuronas capaces de recrear la percepción de un objeto con la visión de sólo una parte de ese mismo objeto, es decir, sobre la base de memorias previas, el cerebro es capaz de abstraer a veces “especulando” y construir un objeto que no ha sido visto nunca en todas sus dimensiones y posiciones físicas posibles.
Es decir el cerebro humano trabaja categorizando y clasificando el mundo visto hasta alcanzar en esa clasificación la idea de objetos con propiedades que aun cuando extraídas de lo particular no las poseen los objetos concretos y que sin embargo pueden aplicarse a todos los objetos concretos.
Esta actividad cerebral hoy se piensa que se encuentra distribuida en amplias zonas de la corteza cerebral y el sistema o cerebro emocional y cuyo funcionamiento está escrito en códigos de tiempo.
¿Pero qué tiene que ver este proceso, con el arte y la belleza?. En ese proceso de abstracción que hemos descrito, la belleza es un “plus emocional” que nuestra consciencia añade a las necesidades de nuestra naturaleza humana.
Esto es, aspiraciones de alcanzar una satisfacción emocional que no proporciona esa “realidad” concreta. Y es con este añadido emocional a la abstracción que una mujer, un paisaje o un gesto se pueden convertir en una mujer hermosa, un paisaje hermoso o un gesto hermoso.
Y es así como esa emoción llevada a la consciencia crea el sentimiento del ideal. Pero sólo el artista, el artista genial, puede llevar ese ideal de mujer o paisaje tan lejos como para, tras ser construido en su cerebro y plasmado en la pintura o la literatura, la escultura o la arquitectura o en el idealizado sublime de la música, pueda ser admirado por todo el mundo.
El talento de un artista es lo que le hace capaz de plasmar en tela, madera, roca o pentagrama los abstractos insatisfechos, los ideales.

OBRAS DE ARTE UNIVERSALES:
Cuando estos ideales, estos universales máximos, son identificados como tales por mucha gente, estamos ante una obra de arte universal, ante lo que realmente reconocemos como belleza.
Y todavía más. Lo que el artista genial logra evocar en los demás seres humanos, no es sólo la admiración pasiva de la belleza por él lograda, sino el que cada uno de ellos recree en su propio cerebro, activamente, su propia concepción de belleza y la proyecte a la obra genial que contempla.
Lo que nos lleva a la idea nueva y sorprendente de que una obra artística genial produce en quien la contempla algo que la obra en sí misma no tiene.
Por eso se dice que las obras geniales mas grandes, las mas bellas y hermosas son siempre obras dejadas a que las remate quien las contempla. Por eso son universales.
Fotografía: Gentileza del Dr.Fabio Celnikier -
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