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10/7/15

El poder del bien: Salvemos a los niños ... salvemos al mundo: La increíble historia de Nicholas Winton quién salvó a 669 niños del Holocausto

Sir Nicholas Winton, fue un filántropo británico de origen judío que salvo en 1939 a 669 niños judiós de la muerte a manos de la Alemania nazi, semanas antes del inicio de la segunda guerra mundial.
Sin embargo permaneció su historia en el completo anonimato hasta que en 1988 su esposa Greta , encontró un viejo maletín de cuero escondido en el desván de casa y, rebuscando entre los papeles que contenía, se topó con las fotos de 669 niños que Nicholas Winton había conseguido sacar desde Checoslovaquia hacia Inglaterra, así como también encontró una lista con el nombre de todos ellos y algunas cartas de sus padres. Tal descubrimiento provocó que Winton no tuviera más remedio que explicarle a su esposa lo que había acontecido décadas atrás.
Monumento a Nicholas Winton, instalado en la Praha hlavní nádraží (Praga) en 2009.
Winton entró a trabajar en 1931 como agente de bolsa en su ciudad natal, así hasta el estallido de la Segunda Guerra Mundial. En diciembre de1938 tenía previsto pasar unos días de vacaciones esquiando en Suiza, cuando recibió una llamada telefónica de su amigo Martin Blake, en la que éste le pedía que cancelara todos los planes que tuviera para esos días y se dirigiera a Praga.
"Tengo una propuesta muy interesante para ti. No te molestes en traer los esquís", le dijo Blake. 
Al llegar a Praga, Blake le preguntó si quería echarle una mano y trabajar temporalmente en los campos de refugiados de la zona, donde miles de seres humanos, muchos de los cuales eran niños de origen hebreo, malvivían en condiciones infrahumanas. 
La visión del drama le marcó profundamente. Decidió montar una oficina improvisada en la habitación del hotel en el que se hospedaba y comenzó a elaborar un plan para sacar del país a tantos niños judíos como fuera posible para llevarlos a otros países y salvar sus vidas. En poco tiempo, la comunidad judía de la capital checa se hizo eco de la presencia de Winton en la ciudad y del motivo que le impulsaba a seguir allí. De ahí que centenares de familias acudieran a visitarle para tratar de persuadirle de que incluyera a sus hijos en la lista de los niños que iba a intentar salvar. El alud de solicitudes provocó que se viera obligado a abrir una nueva oficina en la calle Vorsilska para poder atender a tanta gente como fuera posible. Su amigo Trevor Chadwick se ocupó personalmente de ese despacho. En pocos días centenares de familias habían acudido a solicitarle ayuda para salvar a sus hijos.
Consciente de la magnitud del problema que tenía ante sí, contactó con los embajadores de las naciones que consideraba que podrían hacerse cargo de los niños, pero solo el Gobierno sueco accedió a ocuparse de un grupo de niños. Por su parte, Gran Bretaña prometió aceptar a los que fueran menores de 18 años pero solo si antes encontraba a familias dispuestas a acogerlos y que además deberían comprometerse a abonar por anticipado un depósito de 50 libras por cada niño para pagar su futura vuelta a casa.

Nicholas Winton en octubre de 2007.
Finalmente Winton tuvo que volver a Londres para reincorporarse a su puesto de trabajo. Su regreso no le impidió seguir apuntalando su plan de rescate; así, creó una organización a la que bautizó con el nombre de El Comité Británico para los Refugiados de Checoslovaquia, Sección para Niños, que en un principio solo contaba con él mismo, su madre, su secretaria y unos cuantos voluntarios.
Una vez creado el Comité, Winton tuvo que hacer frente a un gran problema: conseguir la financiación necesaria para pagar los costos del viaje en tren de los niños desde Checoslovaquia hasta el país de acogida y encontrar a personas que aceptaran hacerse cargo de estos chicos y pagar las 50 libras que reclamaba el gobierno. Winton comenzó a publicar anuncios en los diarios británicos, en las iglesias y en las sinagogas solicitando ayuda. La respuesta de los londinenses fue entusiasta. En unas semanas, centenares de familias aceptaron acoger a los niños y aportaron el dinero necesario para iniciar los transportes desde Checoslovaquia hasta la capital inglesa.
El primero de ellos se efectuó el 14 de marzo de 1939 en avión. En los siguientes meses se organizaron otros siete transportes, todos por tren. El último tuvo lugar el 2 de agosto. Los ferrocarriles tenían como destino la estación de Liverpool Street, en Londres, donde esperaban las familias de acogida.
El octavo tren tenía que salir de Praga el 1 de septiembre de 1939 y en él iban a viajar otros 250 niños, pero ese mismo día Alemania invadió Polonia y cerró las fronteras. El transporte, literalmente, desapareció. Ninguno de los menores volvió a ser visto nunca más. Fueron 250 víctimas que se sumaron a los más de 15 000 niños que perecieron asesinados en Checoslovaquia durante la Segunda Guerra Mundial.
Winton rescató en total a 669 niños judíos. Su hazaña, que hubiera merecido múltiples condecoraciones y actos de homenaje, quedó en el olvido durante 50 años, ya que prefirió mantener en secreto lo sucedido. Cuando su mujer descubrió toda la historia en 1988 se puso en contacto con Elisabeth Maxwell, una historiadora especializada en el Holocausto nazi y esposa del magnate de la comunicación Robert Maxwell, propietario de periódicos como el Daily Mirror y el Sunday Mirror
Maxwell, cuyas raíces eran checas, quedó tan impresionado por la gesta de Winton que decidió publicar la historia en sus diarios. Poco después, la BBC se hizo eco de los sucesos que habían acaecido medio siglo antes y los acontecimientos se precipitaron. En unos días pasó de ser un personaje anónimo a convertirse en un héroe nacional, tanto en su país como en la antigua Checoslovaquia. Así, la Reina Isabel II le nombró en 1993 Miembro del Imperio Británico. 
El 31 de diciembre de 2002, se lo condecoró con el título de Caballero por sus servicios a la Humanidad.
El 9 de octubre de 2007 se le concedió la máxima condecoración militar checa, La Cruz de 1ª Clase, en una ceremonia en la que el embajador checo mostró su apoyo público a una iniciativa impulsada por estudiantes del país, que contaba ya con más de 32 000 firmas y en la que se solicitaba que le otorgaran el Premio Nobel de la Paz.
El pasado 1o. de Julio de 2015, Nicholas Winton falleció en Inglaterra a la edad de 106 años.

28/10/10

Bill Gates: uno de los más grandes filántropos de la actualidad, cumple hoy 55 años



FILANTROPO: (del griego: philos-amor y antropos-ser humano).
Se considera filántropo, a aquella persona que siente y manifiesta un amor puro y genuino hacia la humanidad toda.
Es una condición que no se obtiene mediante un curso, una carrera académica ni por herencia, sino que se reconoce a raíz de los actos, las actividades, el pensamiento, las actitudes y el proceder que se lleva en la vida.
El filántropo es una persona que canaliza ese amor por la humanidad en tareas, actividades y comportamientos concretos que denotan su intención de mejorar la calidad de vida de las personas que sufren o de aquellas que padecen determinado tipo de carencias.
Un filántropo genuino no siente odio, ni rencor ni resentimiento por persona, clase social, país o etnia alguna, lo cual lo coloca en las antípodas de aquellas corrientes ideológicas que promueven y practican la lucha de clases o aquellas que directamente estimulan y practican la diferencia entre clases sociales o grupos humanos.
Si bien los filántropos millonarios tienen la posibilidad de ser conocidos y destacados como tales, así como también ser recordados por la posteridad, existen miles de personas con esta condición que la desarrollan a través de sus actividades en ámbitos u organizaciones religiosas, o sanitarias (médicos sin fronteras, cruz roja, media luna roja), o a través de diversas ONG’s no abanderadas con ideologías o grupos políticos.
Así como Alfred Nobel ha sido el gran filántropo en favor de las ciencias durante el siglo XX, con la creación de la Fundación Nobel y los premios que anualmente otorga desde el año 1900,
www.nobelprize.org/
en este siglo XXI se perfilan Bill y Melinda Gates como dos de los más grandes filántropos del planeta. BILL GATES Y SU FUNDACIÓN DE BENEFICENCIA. http://www.gatesfoundation.org/Pages/home.aspx
La Bill & Melinda Gates Foundation es la más grande fundación de beneficencia del mundo que ha sido creada por el matrimonio Gates en el año 2000,

Según el acta de creación, la Fundación Bill y Melinda Gates "contribuye a la salud global de la humanidad dedicando considerables recursos personales de sus fundadores, especialmente en el continente africano, y aportando fondos indispensables con el objetivo de erradicar enfermedades como la malaria, el sida y otras que aún causan la muerte de millones de personas al año".
La fundación, además de intentar luchar contra la pobreza apoya las investigaciones en el área de la medicina, como proyectos de vacunación en países en desarrollo.

Asimismo, Gates ha donado dinero a proyectos concretos, como por ejemplo 168 millones de dólares a lucha contra la Malaria en áfrica y 100 millones de dólares para campañas contra el SIDA en la India.

Garantiza fondos para la educación universitaria de las minorías discriminadas de los Estados Unidos, para la prevención del sida y las enfermedades tropicales en Africa, y provee 90% del presupuesto sanitario mundial contra la polio.

En el año 2005, Gates donó veintiocho mil millones de dólares a su propia fundación, (no 28 millones de dólares, digo 28 mil millones!!!!), lo que obliga a ésta, por ley federal, a donar a su vez al menos mil millones anuales en obras como las mencionadas. No satisfecho con ello, en 2005 el dueño de Microsoft hizo una contribución adicional de 750 millones de dólares al Fondo Internacional para la Vacunación, contra enfermedades de la pobreza, como la difteria, la tos convulsa y la fiebre amarilla. Bill Gates no se ha limitado a reunir a un grupo de 120 millonarios estadounidenses que quieren pagar más tasas al morir, sino que ha establecido en su testamento que sólo un 1% de su herencia irá a parar a manos de sus descendientes, dejando el restante 99% para obras de beneficencia internacional.
Dado que la fortuna de Gates ronda los 50 mil millones de dólares, el 1% que les corresponderá representa 500 millones de dólares, lo cual significa una cifra de 100 millones de dólares para cada uno de sus cinco hijos, lo que asegura que ninguno de ellos pasaría necesidades si llevasen una vida medianamente ordenada. Y —he aquí la inteligencia de Gates- es seguro también que de ninguna manera el haber heredado el patrimonio completo de su padre les hubiera garantizado una vida más digna o más feliz, sino que por el contrario.

Bill Gates es uno de los principales impulsores también de limitar la cantidad de dinero heredado y establecerlo en algunas decenas de millones de dólares, ya que considera que son herencia suficiente para cualquier ser humano, y hace que el resto de las propiedades del difunto sean heredadas por la Humanidad.

Si se tratara de empresas éstas serían reprivatizadas.

Los beneficios de esta tasa de herencia global permitirían bajar las demás tasas y conformar un impuesto global a favor de la creación de un estado de bienestar mundial.
http://www.gatesfoundation.org/Pages/home.aspx

Leer también: EL DINERO LUEGO DE CIERTO NIVEL MINIMO, NO DA MAYOR FELICIDAD

2/2/09

Albert Schweitzer un Apóstol de la Humanidad: médico, teólogo, filósofo, músico, filántropo - Premio Nobel en 1952

Albert Schweitzer: Kaysersberg, 1875 - Lambaréné, 1965): En Lambarene tuve la suerte de vivir con el Dr.Albert Schweitzer, que fue un Apostol de la Humanidad, que habiendo sido un gran interprete de Bach al órgano que llenaba los coliseos con los aplausos y que supo renunciar al éxito para irse al Africa para cuidar la Lepra de los negros más desamparados del Africa Olvidada. (Textual de la Entrevista que le hicieran a Carlos Paez Vilaró en
Fue una gran lesión de ese filósofo que fue también como La Madre Teresa.
http://www.youtube.com/watch?v=b-TmVQYE1g0
Teólogo, filósofo y musicólogo francés. Hijo de un pastor protestante, su actividad se extiende a un tiempo a los estudios teológicos, filosóficos, a la música y a la medicina. El pueblo alsaciano de Gunsbach fue el primer escenario de su infancia, del que siempre guardó un entrañable recuerdo; allí hizo sus primeros estudios.
http://www.gunsbach.fr/

Pasó luego a Mulhouse, donde cursó el bachillerato y se inició en el órgano bajo la dirección de Eugène Munch. Más tarde, en París, estudió Teología y Filosofía en la Sorbona y órgano en el Conservatorio con Charles-Marie Widor.

Doctor en Filosofía en 1899, licenciado en Teología en 1900, dos años después fue nombrado "maestro de conferencias" de la Facultad de Teología protestante de Strasburgo, donde se distinguió por sus opiniones originales sobre el Nuevo Testamento que expuso en la tesis De Reimarus hasta Wrede; historia de las investigaciones sobre la vida de Jesús (1905). Al mismo tiempo se hizo notar como conocedor e intérprete de Bach.

http://www.youtube.com/watch?v=s2lRwGXkr3A
    Sin embargo, en 1913 Albert Schweitzer interrumpió bruscamente su doble y brillante carrera, se graduó en Medicina y partió para el Congo francés, con el propósito de fundar un hospital al servicio de los negros, en el Pueblo de Lambarené. Durante la primera conflagración mundial se vio colocado en situación delicada a causa de su nacionalidad alemana; internado en Francia, aprovechó esta circunstancia para preparar una gira de conciertos de música de Bach, que realizó inmediatamente después de la terminación de la guerra, recitales que lo dieron a conocer y le permitieron recoger los fondos necesarios para la reapertura del hospital de Lambarené. A partir de entonces, su notoriedad como filántropo fue en aumento; su obra de médico y de apóstol mereció el premio Goethe en 1928. la Legión de Honor en 1948 y el premio Nobel de la Paz en 1952.
http://nobelprize.org/nobel_prizes/peace/laureates/index.html

Como autor de investigaciones sobre el Nuevo Testamento, Schweitzer es justamente célebre por sus trabajos sobre historiografía de la vida de Jesús. Esta obra de juventud fue seguida de notables estudios sobre san Pablo: La mística del apóstol Pablo (1930), La historia de las investigaciones relativas a san Pablo, desde la Reforma hasta el tiempo presente (1933), La tesis que sostiene Schweitzer es la siguiente: el cristianismo es esencialmente una escatología, es decir, anuncio del advenimiento del Reino de Dios. Esta espera puede parecer alejada de nuestras modernas concepciones. pero la moral que contiene no lo es en modo alguno, por cuanto consiste en una conducta activa, ni pesimista ni optimista, frente al mundo.

La "veneración de la vida", consecuencia de esta conducta activa, constituye el principio de la religión de Schweitzer y la inspiración de su actividad al servicio del hombre. Él mismo ha hecho notar los puntos de contacto de sus concepciones con la espiritualidad de algunas de las grandes religiones orientales, como el hinduismo y el budismo, con las cuales coinciden en la "veneración de la vida" pero de la que se apartan por una más neta "afirmación de la vida" y del mundo, vinculada a la escatología cristiana. Las obras siguientes son los frutos de esta confrontación: El Cristianismo y las religiones universales (1924) y Los grandes pensadores de la India. Estudios de filosofía comparada (1952).

LA VIDA DESPUÉS DE LOS 60 AÑOS: (Escrito por el Dr. Benito Mario Guerstein en psiconet.com)
Albert Schweitzer fue beneficiado por una vida larga. Quizá lo suficientemente larga para cumplir con su obra y ser el ejemplo más acabado de vida para nosotros, sus contemporáneos, y para el mundo del futuro; hasta adquirir ribetes de mito. Quizá también, en nadie como en él se ha dado aquello de "su vida y su obra" en la forma más "llevadas de la mano" la una con la otra. Y aquí viene la eterna discusión, constructiva por cierto: por un lado tenemos el argumento de unos, que dicen que "todo lo hizo antes de los sesenta años de edad"; por el otro, los que afirman que "todo lo hizo después de los sesenta". ¿Dos vidas y múltiples obras? ¡No, una sóla! Sea como fuere, la vida polifacética y multidimensional que tenemos entre manos, formada por un humanista, un médico, un músico, un ingeniero improvisado, un carpintero, un albañil, un leñador..., y muchas cosas más, todo ello en una misma persona, nos atrapa desde el principio y hasta el fin. Porque el fin es un principio, y así. Nos acuparemos de Schweitzer "después de los sesenta". En enero de 1935, Albert Schweitzer cumplió sesenta años, y la ciudad de Estrasburgo le dio su nombre a un parque. En febrero viajó a Lambarené, Congo francés (hoy Gabón, África Occidental) por siete meses, para trabajar en "su" hospital, que había fundado en 1913. A partir de octubre, recorrió más de una docena de ciudades de Inglaterra, dando conciertos de órgano y conferencias, a beneficio de Lambarené.
    En 1936, realizó un periplo similar en Suiza. En el 37 volvió a Lambarené. En el 38, celebró el 25· aniversario del hospital, recibiendo una donación para un equipo de radiología, suma que cambió por medicamentos, debido a la urgente necesidad de éstos. En el 39 viajó a Europa, pero sólo llegó a destino y decidió regresar a Lambarené, ante la inminencia de la guerra. Allí permaneció incomunicado hasta noviembre del 40, debiendo reducir a la mitad el personal del hospital, que fue respetado en el enfrentamiento entre los partidarios del gobierno de Vichy y los que apoyaban a De Gaulle. Helene Bresslau, su esposa, llegó de Europa en el 41, brindándole generosa ayuda, por su espíritu decidido y por sus conocimientos de enfermería. En el 42, el hospital recibió donaciones de Estados Unidos. En el 43, su hija Rhena casó con T. A. Eckert, fabricante de órganos, y de esa unión nacieron los cuatro nietos de Schweitzer. En el 44, hubo un nuevo apoyo económico por parte de Inglaterra y en el 45, otro más, de Estados Unidos.

En el hospital, las operaciones más comunes eran las de grandes hernias, las de elefantiasis y las abdominales. En enero del 45, Schweitzer cumplió setenta años. Los adolescentes de entonces escuchábamos decir: "Albert Schweitzer es un santo de nuestro siglo".

En mayo del 45 se celebró en Lambarené, al igual que en el resto del mundo, el fin de la guerra. Ello permitió inaugurar el hospital de leprosos, ya que nuevos medicamentos, como el promin y otros, llegados de Estados Unidos, Inglaterra y Suecia, producían una verdadera revolución en el tratamiento, hasta entonces paliativo. Recién en el 48 y después de diez años, pudo Schweitzer volver a Europa y conocer a sus cuatro nietos. Fue invitado entonces a los Estados Unidos (Aspen, Colorado) y ese viaje y sus resultados fue considerado "el acontecimiento cultural más valioso que alguna vez tuvo lugar en los Estados Unidos". Las distinciones se repitieron en Chicago, en Cleveland y en Nueva York. En el 49 volvió a Lambarené, donde lo esperaba un trabajo exhaustivo, al frente de un equipo de treinta personas, con cuatrocientos internados, de los cuales la mitad eran leprosos. Recibió como cooperación mundial "hasta el óbolo de la viuda pobre". En el 51 viajó a Holanda, Inglaterra y Suecia, donde brindó conferencias y recitales de órgano. En Frankfurt le otorgaron el Premio a la Paz. De regreso a Lambarené, la Academia Francesa lo designó miembro. En el 52, volvió a Europa para concluir un tratado de cinco tomos sobre órgano y grabar, diciendo su discurso en la Academia Francesa. Volvió a Lambarené, donde se enteró que fue galardonado con el Premio Nobel de la Paz en 1952. Debió postergar el viaje para recibirlo hasta fines del 54, debido a trabajos en el hospital. También recibió la medalla "Bienvenido de la Real Academia Africana". En el 54, publicó "Lambarené 1946-1954", a sus ochenta años, donde se refirió a agrandamientos en el hospital, a mejoras edilicias y a adelantos en general, como la instalación del servicio de radiología. Para ello, supervisó todo y predicó con el ejemplo. Completó el año trasladándose a Oslo para recibir el Premio Nobel, en medio de una gran recepción y ofreciendo un discurso que recorrió el mundo.En el 55, pasó su 80· cumpleaños en Lambarené, y Alemania le dio la orden civil más alta; a una calle de Frankfurt se le puso su nombre; la ciudad de París lo distinguió con la Gran Medalla de Oro; recibió elogios de Einstein, Nehru y otros; Mónaco emitió cuatro nuevos sellos de correo en su honor; una niña dio un concierto de órgano en Estrasburgo, en su homenaje; la corona británica le otorgó la Orden del Mérito, y la BBC de Londres ofreció cinco programas especiales, dedicados a Schweitzer. Hubo conciertos de beneficencia y felicitaciones. El lema era: "Schweitzer, ciudadano del mundo"Después de los ochenta años, la gran preocupación de Schweitzer siguió siendo el hospital de Lambarené, y a ello se agregó la campaña contra las pruebas nucleares. Primero actuó silenciosamente, a través de personalidades influyentes, y después en tres discursos dichos en Oslo, en el 58, reunidos con el título "¿Paz o guerra atómica?", donde predijo, además de los efectos inmediatos de una guerra, las consecuencias meteorológicas sobre el planeta muchos años después. Ello motivó la consulta sobre la paz mundial por políticos de Estados Unidos, Inglaterra y la India, que lo visitaron en Lambarené. Albert Schweitzer murió en 1965, a los noventa años de edad.